Columna de la presidenta del Consejo Nacional de Televisión, Catalina Parot, publicada en el diario La Discusión de Chillán, el día sábado 22 de septiembre de 2018.
La reciente creación de la región de Ñuble representa la consecución de un gran anhelo para miles de chilenos y chilenas en la zona sur de nuestro país. Se trata de un fundamental impulso al desarrollo económico y social, a una mejora sustantiva en servicios y a la calidad de vida para las nuevas provincias de Punilla, Itata y Diguillín.
Desde el Consejo Nacional de Televisión, celebramos el nacimiento de esta nueva región, pues apostamos a ser una herramienta para impulsar la creatividad de los realizadores locales, a todos quienes busquen reflejar la identidad de la nueva región a través del audiovisual.
La actual región de Ñuble ha sido hogar de grandes producciones de la historia del cine nacional.
Allí creció nuestra Violeta Parra, en los alrededores de San Carlos, tal como pudimos verlo a través de la película, ganadora del Fondo CNTV 2011, “Violeta se fue a los cielos“.
En 1939, en Chillán se filmó “El terremoto en el sur” de Egidio Heiss, y “Chillán desaparece” de Mario Enrique Jara Garrido. Ambas producciones retrataron con crudeza las consecuencias del sismo de ese año en la zona.
Allí también se registró, en 1955, la cinta “Plan Chillán”, de Vinicio Valdivia; un breve documental de divulgación científica que, a partir de la decepción de un huaso que recorre las agrietadas tierras y las cosechas perdidas, encuentra nuevas esperanzas en el plan de desarrollo agrícola que imagina cultivos racionales y una serie de medidas técnicas destinadas a evitar la erosión.
Pocos años después, en 1969, fue filmada la premiada película de Miguel Littín, “El chacal de Nahueltoro”, quizás el filme chileno más aclamado de la historia.
Se trata de producciones ya canónicas del ideario audiovisual del país, y que contribuyeron a convertir la zona en parte del patrimonio fílmico de Chile.
La co-producción chileno-japonesa, “Green Grass”, de próximo estreno, también eligió, en 2016, sus locaciones en la nueva región del Ñuble, y narra la historia de un joven japonés que despierta en el sur de Chile tras un terremoto en Japón.
Más recientemente, “Muralma“, la serie documental que rescata la tradición muralista en el sur de Chile y ganadora del Fondo CNTV en 2016, nos ha narrado la historia detrás del mural “Muerte al invasor” del mexicano David Alfaro Siqueiros, ubicada en la biblioteca de la Escuela de México en Chillán.
Sin duda, existen grandes expectativas sobre el futuro de esta nueva región, y es importante recordar aquellos hitos de nuestra historia cultural que sirven de aliciente a las nuevas generaciones para desarrollar una veta audiovisual, una cantera imaginativa que logre tomar el impulso de este desarrollo territorial y dar una forma definitiva a la identidad de la región de Ñuble.
Catalina Parot Donoso
Presidenta Consejo Nacional de Televisión (CNTV).